El Albergue consta de una planta amplia donde se ubica la recepción y el salón comedor.
La decoración está inspirada en motivos rústicos.
En las plantas primera y segunda se distribuyen las habitaciones.
El ambiente es diáfano y acogedor.
Destaca su buena ubicación, su versátil salón equipado con cocina y menaje para uso del personal alojado, amplio aparcamiento, su estancia diáfana y sus vistas a la montaña desde la zona sur del edificio.
Las habitaciones, tanto dobles con baño como de literas pueden utilizarse para uso individual, para parejas o para grupos.
En las literas, los baños son colectivos, separados por sexos, un ala para las mujeres y otra para los hombres.