Casa centenaria en la que podrá disfrutar de paz, sosiego y aire fresco, con rutas del vino, queso, gastronómicas, históricas, multiaventura...
La casa es una restauración de una casa de gente del campo, se hizo una ampliación, y se ha dejado entrever aquellos rasgos característicos de las construcciones que hacían antiguamente: maderas, piedras, pared de adobes, paredes de tierra..., intentando dejar el sabor de aquella época pero con las comodidades actuales, pues cuenta con aire acondicionado, calefacción, habitaciones con su cuarto de baño.
Además, la casa dispone de un jardín grande lleno de plantas para crear frescor en el verano, una barbacoa para disfrutar de las noches estrelladas de La Mancha conquense, en fin, una casa para satisfacer las necesidades de tranquilidad o no, de sus clientes.
