Villatobas se ubica en unas tierras modeladas por las aguas de los arroyos cercanos, abundantes en variadas especies de fauna y flora, donde en su día abundaron las tobas, una especie de cardo. El ecosistema único de El Cebo se une a otros espacios naturales de especial protección de aves, y de gran interés arqueológico, como el yacimiento Plaza de Moros.
Se trata de una población apacible, cuyos vecinos guardan gran devoción a Jesús Nazareno, patrón del pueblo y a quien el pueblo le tiene dedicado un hermoso santuario.
Quedan aún hoy en Villatobas huellas de un pasado señorial, como la fachada blasonada de la plaza de Fernández Carrión, y el Pasaje de la Encomienda.